31 de mayo de 2007
¿No a la intervención?
Desde el 3 de mayo, el Lenguas Vivas está intervenido. La razón: denuncias por irregularidades contra la rectora, Prof. Ma. Teresa Cañás de Davis, un sumario que se inicia contra la profesora Lucila Gassó, coordinadora de los cursos de AENS, y la coordinadora de la Asoc. Cooperadora, la señora Sarah Schütt.
Lamentablemente, en más de 20 años de democracia, se ve que el pueblo de este país todavía no aprendió a depurar las instituciones a través de sus mecanismos democráticos. Se acusa al Consejo Directivo de complot y se suspende el Reglamento Orgánico, que es el que le otorga sus funciones. Realmente no comprendo los argumentos. Esta acusación demuestra un total desconocimiento de lo que se venía tratando en el Consejo, que pidió informes que le fueron negados por la rectora a viva voz en las últimas reuniones, y estaba compuesto por gente que también estaba en contra de Davis y Gassó. Meter a todo el mundo en la misma bolsa es una muestra de que hay generalizaciones poco científicas y muy injustas detrás de toda esta movida.
La oposición, a quienes ProCET apoyó activamente durante su campaña, apoya abiertamente esta intervención antidemocrática. En su momento me pregunté por qué no presentaron una lista para Consejo. Alegan que "no tuvieron tiempo", "no había voluntad de algunos profesores", "los interinos no tenían voto", que "había gente que tenía miedo" y que "ya habían tenido esa experiencia y no les sirvió", pero después dicen que hace 12 años que vienen trabajando. Señores: ¡No se nota! Después de 7 años, en ProCET sabemos lo que es luchar contra la apatía, pero si la lucha consiste en presentarse a elecciones con un mes de anticipación y con una candidata a rectora que va por las aulas diciendo que no quiere serlo, entonces estamos frente a una clara muestra de falta de compromiso, en primer lugar, desprolijidad, en segundo lugar, y falta de estrategia, finalmente, imperdonable en alguien que conoce los mecanismos de la política y pretende que su comunidad le confíe el voto. Se quejan de que las elecciones eran poco representativas porque había sectores que no tenían voto. Me parece que la profesora Sábato, aún siendo interina, podría haber formado alguna agrupación que aunara esfuerzos en pos de extender el voto a esos grupos "marginales". De haber presentado una lista para Consejo, por sistema D'Hont, la oposición podría haber puesto este tema sobre tablas y hubiera obtenido la mayoría, porque los alumnos éramos 6 y los profesores 3, últimamente. Para cambiar las cosas, hace falta constancia: en los últimos siete años -de los doce que dicen que hace que trabajan-, sólo fui testigo de una elección en la que hubiera otra lista. El resto del tiempo se lo pasaron haciendo denuncias fuera del Lenguas, sin asistir siquiera a dos reuniones de Consejo, sin leer las actas, sin contactar a quienes los apoyamos en la campaña para que presentáramos un proyecto (por ejemplo, para que los interinos pudieran votar). Entonces no se puede hablar de que "no se podían solucionar las cosas desde adentro".
Esta intervención tiene principio pero no tiene fin. A mí, que soy Consejera alumna, me quita la posibilidad de cualquier participación actual y futura, porque para cuando esto "se supone" que haya terminado, ya me habré recibido. Está coartando mi derecho y el de mis compañeros a la participación, porque si me citan a hablar, quiero que mi participación pese de acuerdo con el cargo para el que fui elegida por el voto de mis compañeros, y no que sea tomada como meras "sugerencias". Esta intervención me difama gratuitamente a mí y a mis compañeros, interrumpe una trayectoria de trabajo constante en nuestro claustro y genera una situación de caos institucional, en el que los vicerrectores, jefas de carrera, de trayectoria intachable (y quién sabe quién más en los próximos días), renuncian por no conocer sus funciones, que estaban claramente dispuestas en el Reglamento Orgánico. Se aduce, para su suspensión, que no había sido homologado por el gobierno de la Ciudad, pero yo digo que fue reconocido De Hecho, con el pago de sueldos a directivos elegidos de acuerdo con ese Reglamento. El Juez Otheguy, más categórico, dice que el Reglamento es una ley especial, y como tal, debería ser derogado por otra ley especial. Una resolución no es ley. Ahora, ¿por qué les tomó casi 15 años darse cuenta de que tal vez el reglamento no les gusta tanto y necesitan intervenir el instituto para modificarlo? Perfectamente podrían haber bajado una línea como lo hicieron con el cambio de plan de estudios. En la resolución 1401 no se plantean objetivos claros ni fechas concretas. Los objetivos, según palabras del propio Pompei, son "vagos". Me pregunto por qué imponen esta situación traumática a una comunidad, que como cualquier otra tenía sus problemas, pero que no es cierto que estuviera en crisis. Si el problema es la rectora, ¿por qué no la suspendieron y asumía la vicerrectora, que no tiene ningún sumario ni sospecha? ¿Cuándo se hará cargo esta sociedad de sus instituciones y tratará de mostrarles un poco de respeto? ¡¿Cuándo llegará el día en que nos demos cuenta de que las instituciones son las que dan el marco al Estado de Derecho, al Imperio de la Ley, y que sin estos principios, no existe la Justicia?! Pero claro, es más fácil decir que no hay tiempo, no hay ganas, no hay gente, que tratar de construir despacio, con legitimidad. Todo esto me da vergüenza ajena, vergüenza por una generación que yo creía que había aprendido de su pasado y había dicho que no quería que se repitiera nunca más. La democracia, para los que no saben, empieza por casa.
Mariana Passo Salleras
+ Info: https://www.everyoneweb.com/letrasvivas/
Firmar el Libro de visitas Ver libro de visitas
|